Los cuerpos en el espacio –su sonoridad, gestualidad y expresividad– son fundamentales para explorar procesos cognitivos, corporales y sociales que nos interesan. Durante el confinamiento y distanciamiento que experimentamos en la actualidad, encontramos una oportunidad para desarrollar estrategias creativas e investigativas: ¿Es posible la producción de sentido conjunto en el espacio virtual? ¿Cuáles son las posibilidades de expresión en el movimiento corporal acotado por una condición espacio-temporal distinta de la acción presencial de los cuerpos? ¿Podemos desarrollar estrategias para la producción de imaginarios sustentados en una lejanía material y una cercanía virtual?