En la crisis masiva del coronavirus, todavía inconmensurable por sus consecuencias económicas, se encuentran las oportunidades para una mejor sociedad “poscoronial”. Si bien algunas de estas oportunidades ya han sido dilapidadas, detrás de la fachada del imperativo virológico se desarrollan intensas luchas nacionales y geopolíticas. Markus Gabriel expone el por qué el tratamiento europeo de la pandemia puede desembocar en una cyber dictadura suave. El cese de la vida pública no ha significado la retirada al espacio privado, por el contrario, ha entregado una parte sustancial de nuestras vidas privadas al capitalismo de vigilancia. ¿Bajo qué condiciones éticas podría ser introducido un sistema de vigilancia digital del coronavirus en Alemania y en Europa?